Es fundada la Villa de Durango por Francisco de Ibarra y su pequeño ejército. Durango era el nombre de un poblado en la provincia española de Vizcaya, lugar donde Ibarra había nacido.

A partir de 1631 se le reconoció la categoría de Ciudad en la documentación oficial y Felipe IV le concedió su escudo de armas, lo que le valió superar la crisis que amenazaba con trasladar la capital a Parral.